
Historia de los espacios: arquitectura y arte.
o arte arquitectónico
Arquitecto y artista
Desde el inicio de mi carrera siempre he oscilado entre dos mundos: el del arquitecto, riguroso, estructurado, en busca de funcionalidad, y el del artista , imbuido de libertad, expresión y emoción. Estos dos universos, aunque distintos, siempre me han parecido intrínsecamente vinculados.
Cuando el arte se fusiona con la arquitectura
La fusión del arte con la arquitectura es un proceso delicado y rico. Es una danza donde la forma se casa con la función, donde la expresividad artística magnifica la utilidad de un espacio. A menudo he jugado con esta idea, buscando insuflar un alma artística a las estructuras que diseño, al mismo tiempo que me aseguro de que cada obra, cada espacio, cuente una historia .
¿Arquitectura en oposición al arte?
Es fácil pensar en la arquitectura y el arte como dos disciplinas opuestas: una pragmática y la otra emocional. Sin embargo, en mi carrera , rara vez los he visto en dicotomía. La arquitectura, en esencia, es una expresión artística. Da forma a espacios, ciudades e influye profundamente en nuestra experiencia diaria.
Historia de los espacios…
Mi arte está profundamente influenciado por mi formación arquitectónica. Cada pincelada, cada elección de color, cada textura utilizada refleja una intención, una estructura, una visión “arquitectónica” . Es un arte que se basa en los fundamentos de la construcción, al tiempo que permite la libertad de formas y la experimentación. Una relación entre historia, espacios y formatos.
Un vínculo a escala humana que los une
En el corazón de esta intersección entre arte y arquitectura está lo humano. Cada espacio que diseño, cada cuadro que pinto, busca establecer una conexión humana. Es una escala , una proximidad, una interacción que siempre sitúa al ser humano en el centro.
Las obras… una cuestión de escala
Ya sea en un fresco monumental o en un boceto delicado, la escala lo es todo. Determina la relación entre el observador y la obra , entre el habitante y el espacio. Mi trabajo, ya sea sobre lienzo o sobre concreto, explora constantemente esta dinámica, esta tensión entre lo grande y lo pequeño, lo monumental y lo íntimo.
Integración o inserción: un vocabulario común
Tanto en el arte como en la arquitectura, las nociones de integración e inserción son centrales. Integrar una obra en un espacio, insertar un edificio en un paisaje urbano o natural, requiere una reflexión profunda sobre la armonía, el diálogo y la simbiosis. Esta búsqueda del equilibrio está en el corazón de mi práctica, ya sea artística o arquitectónica.
A través de mi enfoque, intento establecer un puente entre estos dos universos, uniéndolos en una exploración armoniosa del espacio, la forma y la emoción.